Casa Muria, se caracteriza por sugerir actividades relacionadas con el medio natural, senderismo, btt, escalada, esquí etc.

En esta ocasión, os vamos a sugerir una actividad diferente, descubrir el Románico Lombardo del Valle de Boí a 45 minutos de Casa Muria en moto, una de nuestras pasiones.

Decidimos aprovechar el día, y después de un buen desayuno arrancamos nuestras motos y dirigimos nuestro rumbo hacia el Este, a través de la mítica carretera Eje Pirenaico nacional N260.


El paisaje es espectacular, Call de Fadas, Call de la Espina, y más y más curvas que nos llevaron hasta la carretera que une Lérida con el valle de Aran. En pocos kilómetros vimos un cartel que indicaba cambio de dirección a Vall de Boi, giramos a la izquierda y empezamos a descubrir un nuevo territorio.

Nuestra sugerencia, es que vayáis primero a ver la Iglesia de Santa Eulália del pueblo d’Erill la Vall. Allí no dejéis de visitar el centro de interpretación del románico, y sacad el forfait que os permitirá visitar todas las iglesias del valle, resulta muy interesante, así lo hicimos nosotros y comenzamos nuestra visita por este precioso valle que nos hizo disfrutar de su paisaje, su gastronomía y sobre todo de su cultura milenaria que es como seguir los pasos de nuestros antepasados.

Caminar por el Valle de Boí es mucho más que disfrutar del paisaje, es caminar por la historia, retroceder en el tiempo y revivir una parte de la forma de vida de aquellas gentes.
Encontramos ocho iglesias y una ermita románica, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Sant Climent y Santa María de Taüll, Sant Joan de Boí, Santa Eulàlia d’Erill la Vall, Sant Feliu de Barruera, la Nativitat de Durro, Santa Maria de Cardet, la Assumpció de Cóll y la ermita de Sant Quirc de Durro, está última os recomendamos que la visitéis al atardecer, el paisaje es espectacular.

El día es largo e intenso, la subida a los campanarios de cada iglesia sin duda nos abrieron el apetito, menos mal que teníamos una serie de restaurantes que nos habían recomendado para poder elegir y sentarnos a disfrutar de una buena comida, rodeados de un paisaje increíble, con el objetivo de coger fuerzas para poder seguir disfrutando toda la tarde del resto de iglesias.

Os recordamos los restaurantes….El Fai, El Caliu y Ca La Pepa.

Después de comer, nos dirigimos a ver la proyección de vídeo mapping, en la iglesia de Santa María de Taüll, una recreación de cómo se encontraban las pinturas en el siglo XI en su estado original, realmente espectacular.


Fue un día muy completo, así que después de llenar nuestros sentidos, y maravillosas sensaciones, nos montamos de nuevo en nuestras motos e iniciamos el camino de vuelta, en este caso hacia el oeste dirección Casa Muria, volviendo a disfrutar de un precioso atardecer en el Valle de Benasque.

 

Cuando estéis en Casa Muria, os haremos más sugerencias interesantes, para descubrir este tipo de tesoros desde nuestra casa.

No Time To Losse!